2) Dejar las semillas en agua durante 6 horas o toda la noche.
3) Descartar el agua. Ponerle una gas o tul al frasco y sujetar.
4) Dejar el frasco inclinado boca abajo.
5) Enjuagar 2 o 3 veces al día, descartando el agua.
6) Dependiendo de la semilla, al segundo o tercer día ya se pueden
comer los brotes.
Estos germinados son ideales para consumir junto con ensaladas, wraps y salsas, entre sus beneficiosas propiedades:
Aminoácidos Esenciales (Proteínas), Vitaminas C. B, E, Clorofila (Absorbida por la sangre activa el metabolismo mejorando las defensas y regenerando las Celulas), Hierro, Oligoelementos, Enzimas.
Son digestivos, nutritivos y de bajas calorías.
También puedes hacer de sésamo, ajonjolí, trigo, garbanzo, soja, quinoa, fenogreco.