Activar semillas y frutos secos: aumentando los nutrientes y reduciendo las grasas

Activar las semillas o frutos secos se refiere a un proceso muy simple: dejarlas remojando en agua por algunas horas y luego secarlas.



Se le llama activación, porque al realizar este proceso, se desactivan ciertos inhibidores enzimáticos presentes en las semillas o frutos secos, los que sabiamente han sido creados por la naturaleza para que estos sólo germinen en contacto con las condiciones adecuadas de agua y luz. Cuando se presentan todas las condiciones, se activan los nutrientes que van a permitir que de las semillas y frutos secos crezcan nuevas plantas o árboles.


Pero además, esto significa que al remojar las semillas o frutos secos en agua se vuelven mucho más fáciles de digerir y las vitaminas y minerales presentes en ellos se multiplican y se absorben con mayor facilidad.

Hay muchas personas a las cuales los frutos secos como nueces, almendras, pistachos, maní, etc. les producen malestar estomacal, y notan una gran diferencia al comerlos una vez que han sido activados.

Es importante saber que este proceso sólo va a funcionar si se realiza a semillas o frutos secos que no están tostados, es decir, deben estar crudos. Además, en general no recomiendo el consumo de nueces, almendras , pistachos, maní, etc. una vez que han sido tostados y menos aún si vienen con sal. Los frutos secos y semillas contienen muuuuuuchos nutrientes, y si han sido calentados a altas temperaturas los nutrientes seguramente se habrán destruido. Por otro lado, los frutos secos y semillas son ricos en grasas saludables y vitales para mantenernos sanos, y al tostar los frutos secos estas grasas se vuelven rancias y dejan de ser beneficiosas para el cuerpo.

Por eso, si quieres obtener los miles de beneficios de los frutos secos y semillas puedes realizar el proceso de activación que se realiza así:


1.- Dejar remojando la cantidad deseada de frutos secos o semillas en agua (ojalá purificada) durante 8-12 horas. Yo usualmente lo dejo toda la noche.

2.- Al día siguiente se elimina el agua y se enjuagan las semillas. Lo mejor es botar esa agua y no consumirla.

3.- Si es verano puedes dejar secando al sol las semillas o frutos secos hasta eliminar la humedad y si es invierno las puedes poner a secar en un horno deshidratador o en un horno eléctrico a la temperatura mínima.

4.- Si no quieres o puedes secarlas, es recomendable dejarlas en el refrigerador, en donde se van a mantener por unos 3 días. Si este es tu caso, lo mejor es no remojar grandes cantidades porque o si no se echarán a perder.

5.- Si las semillas o frutos secos se encuentran bien secos, los podrás guardar por meses, pero deben estar completamente secos! Si no verás como en poco tiempo les crecerán hongos.

Extraído de http://www.lovinglife.cl