La Sabiduría del Organismo


Al tomar conciencia de la sabiduría del organismo, veremos que lo único que se puede hacer es confiar plenamente en los poderes del organismo. Hay que establecer las condiciones mas favorables para restablecer el estado de salud y dejar que el cuerpo trabaje sobre si mismo.

La única sanación existente es la desarrollada por el propio organismo y, por lo tanto, no existe otra sanación posible.

El cuerpo humano esta dotado de inmensas provisiones para dotarlo de bienestar y longevidad. El organismo cuenta con varios agentes de control y regulación, que velan continuamente por el mantenimiento del equilibrio orgánico ideal. No obstante, cuando el organismo sufre de forma reiterada los impedimentos de unas condiciones adversas, estos agentes pierden su efectividad.

Es evidente nuestra incapacidad intelectual para comprender la sabiduría del organismo, cuya magnitud y eficacia supera nuestras posibilidades. El cuerpo no precisa que le ayudemos. Lo único que necesita el organismo es poder administrar adecuadamente sus necesidades de forma independiente. Nuestro único apoyo debe consistir en crearle condiciones higiénicas más idóneas, una tarea que no requiere demasiado esfuerzo de nuestra parte.

A saber:

· La inteligencia innata, del universo, opera con gran eficacia sobre el organismo. Esta inteligencia es inherente y automática. Se transmite de generación en generación.

· La inteligencia interna y la programación suministran las necesidades que el cuerpo necesita.

· La perfecta nutrición de las millones de células y elementos que componen nuestro organismo, requieren una lógica que sobre pasa nuestros límites de la habilidad intelectual.

· Cada célula que se encuentra en el organismo es fundamental para el perfecto funcionamiento del cuerpo. El organismo es parsimonioso y no tolera la existencia de sustancias toxicas.

· El cuerpo actúa con firmeza para detener invasiones exógenas.

· El organismo, posee “enzimas asesinas”, denominadas lisosomas, que utiliza para digerir tumores cuando posee la cantidad de energía precisa, como sucede cuando se encuentra en estado de ayuno.

· Aquellas células que se encuentran tan intoxicadas que han perdido toda su funcionalidad se convierten en células cancerígenas. El resto de las células se encargan de aniquilarlas, siempre que posean la cantidad precisa de vitalidad residual y las fuentes nutricias sean correctas.

· El cerebro y su inteligencia, son un motor y un ordenador muy importante en el organismo.

· El organismo es el único agente que cuenta con las fuentes, el poder y la pericia necesarias para mantener su entorno y sus operaciones en pleno rendimiento y para restaurarlas si sufrieran algún daño provocado por factores adversos.

· Casi todas las personas que sufren problemas, son víctimas de una programación viciada. Es necesario cambiar el trasfondo ideológico de la persona, para poder librarse del sufrimiento, la infelicidad y por supuesto recuperar su salud.

Lo mejor que podemos hacer por nuestro organismo es colaborar con él, no interferir en su organización y funcionamiento ni entorpecerlo. Debemos aceptar que nuestras capacidades son muy limitadas como para comprender la inteligencia universal. El campo de lo infinito no cabe en el pequeño mundo finito de nuestra naturaleza. Las malas acciones que provocan una muy mala influencia sobre las personas, los pares, los amigos y sobre nuestros hijos y padres, surgen como consecuencia de una educación reductiva y simplista. La humildad y la bondad deben fluir y aceptar. La sabiduría reconoce nuestra naturaleza finita y admite la ignorancia. Esta virtud no suprime nuestros impulsos innatos para buscar nuevos conocimientos, sino que surge de una comprensión que estimula la búsqueda de una sabiduría mayor.

Entonces no podemos hacer otra cosa que aceptar que el cuerpo humano opera sobre principios que manifiestan el dominio de la ley y el orden en el reino orgánico y cada uno de nuestros actos debería ajustarse y fluir con las leyes universales de la existencia, disfrutar de la danza de la creación bailando en ella.